Es importante saber
*Adaptado del proyecto Pro Safe Sport+ de la Unión Europa y el Consejo de Europa
A los niños, niñas y jóvenes les cuesta mucho hablar de ello cuando están sufriendo violencia o abuso y dependen de que los adultos de su entorno detecten las señales en ellos, en sus abusadores o en los entornos donde se desarrollan. Es fundamental que las organizaciones deportivas cuenten con personal formado en protección del menor y que sus órganos de gobierno implementen reglamentos, protocolos, códigos de conducta y buenas prácticas que especifiquen los comportamientos aceptables e inaceptables cuando se trabaja con menores.
- Los niños, niñas y jóvenes son ciudadanos de pleno derecho. El respeto por sus derechos debe estar en el centro de todas las consideraciones.
- Los entrenadores y demás personas del entorno del menor hacen su trabajo, pero los éxitos deportivos pertenecen a los niños, niñas y jóvenes que los consiguen.
- El deporte es UNO de los muchos entornos en los que los niños, niñas y jóvenes se desarrollan, pero no es el único. La familia, los amigos y el entorno escolar deben continuar siendo parte de las vidas de los deportistas incluso en los casos en los que el nivel deportivo y la implicación son altos;
- Los niños, niñas y jóvenes tienen sus propios sueños, opiniones, ideas y una voz clara sobre todo lo que les afecta. Deben ser escuchados. Su visión de las cosas debe ser tomada en consideración en todo lo relacionado con su vida y su desarrollo (también su desarrollo deportivo).
- Igual que se pide ayuda cuando hay una lesión física, se debe pedir ayuda si el dolor es emocional. Se deben fomentar metodologías holísticas de trabajo con menores.
- NO EXISTE el consentimiento en una relación entre un adulto y un niño, niña o adolescente.
- Las relaciones sentimentales entre entrenador o entrenadora y deportista son SIEMPRE inapropiadas debido a que es una relación desigual de poder entre las dos personas.
- Tanto hombres como mujeres pueden abusar de menores, pero ten en cuenta que también los menores pueden abusar de otros menores más jóvenes o vulnerables.
- Los niños, niñas y jóvenes deben ser conscientes de la necesidad de establecer límites claros en todo lo relacionado con sus cuerpos y sus emociones y que estos límites deben ser respetados.
¿Cómo responder si un niño, niña o joven te confía que está sufriendo violencia?
Recomendaciones
*Adaptado del Proyecto Safe Sport+ de la Unión Europa y el Consejo de Europa.
Todas las personas en un club deportivo deben conocer las políticas y procedimientos relacionados con la protección del menor además de saber cómo y a quién informar ante cualquier sospecha de violencia o abuso contra un niño, niña o joven, dentro o fuera del entorno de la organización.
Todas las organizaciones deportivas deben:
- designar a una persona como Delegad@ de Protección. Sus datos de contacto deben ser fáciles de encontrar y estar siempre disponibles.
- implantar un reglamento de protección del menor, monitorizarlo y revisarlo periódicamente.
- implantar códigos de conducta y buenas prácticas para adultos y menores;
- implantar procedimientos de respuesta ante sospechas de violencia o abuso hacia menores que incluya el procedimiento de actuación cuando es el propio menor el que denuncia.
- implantar procedimientos y reglamentos disciplinarios ante quejas y denuncias.
- asegurar que todos los niños, niñas y jóvenes deportistas a su cargo conocen sus derechos y los mecanismos a su disposición para pedir ayuda.
- asegurarse de que todas las personas pertenecientes al club saben cómo y dónde informar de cualquier sospecha.
Si un niño, niñas o joven te confía que está sufriendo violencia y/o abuso, recuerda que para la mayoría de ell@s es extremadamente difícil hablar con un adulto sobre la violencia que está sufriendo. Estos son algunos consejos.
Es muy importante que:
- mantengas la calma y no muestres enfado o desaprobación;
- escuches atentamente lo que el niño, niña o joven te está diciendo;
- te asegures que el o la menor entiende que ha hecho lo correcto contándote lo que está pasando y que no es, en ningún caso, su culpa;
- te asegures de que el o la menor entienda que le crees;
- dejes que el niño, niña o adolescente te cuente libremente lo que quiera contarte;
- no le sometas al “tercer grado” y que solo hagas las preguntas necesarias para aclarar alguna cosa que no hayas entendido. Recuerda que el niño, niña o joven podrá ser entrevistado más tarde por especialistas;
- evites hacer promesas que no podrás cumplir, como prometer que mantendrás todo en secreto;
- hables con el niño, niña o joven lo que va a ocurrir a continuación y le ofrezcas información sobre otras formas de pedir ayuda dentro o fuera del entorno deportivo;
- entiendas que no es tu responsabilidad investigar un posible caso;
- entiendas que Sí tienes la responsabilidad de informar a la persona designada como Delegad@ de Protección de la organización deportiva a la que perteneces.
- entiendas que, si tu club no tiene a una persona de referencia para temas de protección del menor, es posible que tú mismo tengas que si informar a las autoridades competentes cualquier sospecha de que algún niño, niña o joven pueda estar en peligro.
En España es obligatorio por ley poner en conocimiento de las autoridades competentes cualquier sospecha de violencia o abuso hacia un niño, niñas o adolescente (Ley Orgánica 1/1996, de 15 de enero, de Protección Jurídica del Menor).